Violencia que cruza géneros musicales

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Francisco Rodríguez-Burns / Primera Hora

Puerto Rico y México comparten mucho más que el español.

Ambos países enfrentan una lucha sin cuartel contra el narcotráfico. Las muertes vinculadas al trasiego de droga mantienen en estado de sitio a gran parte de la población.
Aunque para algunos expertos del tema Puerto Rico no se podría definir como un narcoestado, la Isla exhibe patrones sociales y culturales que han dado pie para la confraternización entre figuras públicas y narcotraficantes bajo un mismo escenario.

• Cosculluela canta con los cacos

La aparición del artista Cosculluela con sujetos armados en una tarima del residencial Sabana Abajo, de Carolina, podría resultar chocante y podría establecer un precedente, aunque las autoridades cuentan con una multitud de vídeos y fotos sobre operaciones de narcotráfico que se realizan a plena luz del día.
Las autoridades federales y estatales han mostrado muchas de estas imágenes en reuniones a puertas cerradas con los medios de comunicación. Algunas muestran a niños, tan jóvenes como de 6 a 7 años de edad, vendiendo drogas en los puntos que ubican frente a escuelas o en otros lugares públicos.
Y al igual que en México, donde los máximos exponentes de los narcocorridos cantan para los capos, algunos de los artistas más celebres del reguetón han sido vinculados a pejes gordos puertorriqueños, como José “Coquito” López y Angelo Ayala Vázquez, mejor conocido como “Angelo Millones”.
La información más contundente que establece el vínculo se desprende de pliegos acusatorios federales.

Investigadores han concluido que los narcotraficantes financian fiestas con reguetoneros para tener contentos a los residentes de sus territorios. Se desprende de entrevistas con altos oficiales de la Uniformada que la fama de artista que se presenta en los eventos de los complejos públicos guarda una relación directa con su poder y el dominio que ejercen sobre su feudo.
Uno de los casos más emblemáticos es el de Angelo Millones. Un pliego acusatorio federal detalla que el narcotraficante utilizó el dinero procedente de las ventas de drogas para “organizar, ser anfitrión y financiar las fiestas de Navidad en el residencial José Celso Barbosa (el centro de operaciones de la organización criminal) entre el 2004 y 2008”. Los artistas Wisín y Yandel, Don Omar y el merenguero Elvis Crespo depusieron ante el Gran Jurado federal que se convocó contra Angelo Millones.
Cabe destacar, además, que en junio de 2009 las autoridades le habían confiscado a Angelo Millones material discográfico de los sellos disqueros “Machete Music, Gold Star Music y Flow Music, con los que han grabado los reguetoneros Wisin & Yandel, Don Omar, Héctor El Father, Ivy Queen, Arcángel, Daddy Yankee, Ángel & Khriz, Luny Tunes y Ñejo & Dálmata, entre otros.”
“Coquito” López, quien murió en julio de 2009 luego de un atentado a mano armada, también había tenido su propia disquera de reguetón. Algunos de los nombres de artistas reconocidos se vuelven a repetir. Entre los músicos que habían grabado con su discográfica cabe mencionar a Wisin & Yandel, Don Omar, Ivy Queen, Arcángel, Daddy Yankee, Ángel & Khriz, Luny Tunes y Ñejo & Dálmata, entre otros.
Un libro sobre José Figueroa Agosto, mejor conocido como “Junior Cápsula”, publicado en la República Dominicana llegó a plantear que éste pudo financiar a reguetoneros puertorriqueños a través de los negocios que éste mantuvo con Angelo Millones, uno de sus principales socios en Puerto Rico.