El papá del pequeño durmió en la cárcel de Bayamón tras admitir que se le zafó un disparo
Por Javier Colón Dávila / jcolon@elnuevodia.com
El niño de cuatro años baleado supuestamente por accidente por su padre ayer en Trujillo Alto se recupera poco a poco en el Centro Médico de Río Piedras, explicó el director de dicha institución, el doctor Ernesto Torres.
El niño Sebastián Ramos Moreno respira por su cuenta esta mañana en la sala estabilizadora del Centro Médico y no sufrió lesiones de cuidado en órganos vitales.
"Estuve esta mañana reunido con el doctor Canario, quien fue el que lo operó. Me dijo que la intervención fue todo un éxito y que incluso no está entubado", dijo Torres al comentar que hoy posiblemente el niño, quien está sedado, sea transferido al Hospital Pediátrico.
Torres explicó que la bala rozó el intestino del niño, pero no fue necesario una colostomía.
"Está en condición estable", dijo. El padre del niño durmió anoche en la cárcel regional de Bayamón.
Contra Iván Ramos Correa, de 24 años, pesan cargo de tentativa de asesinato, dos violaciones a la Ley de Armas y maltrato de menores.
Al no presentar la fianza de $230,000 impuesta por el juez superior Wilfredo Vieras, el sujeto fue ingresado a prisión.
Los cargos fueron sometidos por la fiscal Elba Cruz Rodríguez, en colaboración del agente Héctor Ramos y el sargento Antonio Pérez Maisonet.
Pérez Maisonet explicó a El Nuevo Día que luego de ofrecer una versión falsa de los hechos, el padre del niño explicó que se encontraba pintando la barbería cuando salió fuera de la estructura donde se encontraba el menor. Fue entonces que, supuestamente, observó un auto “nebuloso”, sacó un arma ilegal y supuestamente se le zafó un disparo.
El sargento indicó que no hay más testigos de lo ocurrido. Otros parientes del menor sólo alegaron que escucharon un disparo.
Los padres de Sebastián se encuentran separados y ayer su padre y su abuelo estaban bajo su cuidado.
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