En la recta final caso contra Angelo Millones

Los 12 miembros que componen el jurado comenzarán hoy a deliberar en el juicio contra Angelo Millones y su hermano. (Archivo)

Francisco Rodríguez-Burns / Primera Hora

La Fiscalía Federal concluyó que el caso criminal que radicó contra el notorio Ángel Ayala Vázquez, mejor conocido como “Angelo Millones”, y su medio hermano, Luis Xadiel Cruz Vázquez, sirvió como una “lección detallada” de cómo el narcotráfico opera en la economía subterránea de Puerto Rico mediante la utilización de testaferros, pagos en efectivos que no tributan y la utilización de terceras personas que se lucran a través de las ganancias ilegales de los narcotraficantes.

Los planteamientos de la Fiscalía, en gran medida, abordaron las actividades de lavado de dinero de la empresa criminal y cómo importantes figuras de la farándula, como “Luisito” Vigoreaux, “el Caballero de la Salsa”, Gilbertito Santa Rosa, y el dúo de reguetón, Wisin y Yandel, fueron pagados con dinero producto de las ganancias de la organización.Tanto la fiscal Jenifer Hernández durante su argumento final en el juicio como el fiscal Timothy Henwood, mediante su refutación de la presentación de la defensa, aseguraron que el caso de Angelo Millones en gran medida explica elementos importantes de la economía subterránea de Puerto Rico. Las declaraciones de los representantes del Ministerio Público intentaron sellar la evidencia presentada contra Angelo Millones antes de que iniciara el proceso de deliberación del jurado.

Los 12 miembros del panel comenzarán a deliberar hoy por la mañana luego que las partes realizaran sus argumentos finales y el juez federal que preside el caso, Juan Pérez Giménez, impartiera sus últimas instrucciones.

Según las autoridades federales, la banda dominó la venta de drogas en Bayamón y en otros sectores de la zona metropolitana entre 1995 y 2009, y dirigió gran parte de los envíos de cargamentos de cocaína entre la República Dominicana, Puerto Rico, Nueva York y Orlando mediante la colaboración recibida por la banda dirigida por “Junior Cápsula”, el alias más conocido de José Figueroa Agosto.

“Los narcotraficantes no están en el negocio para que las personas puedan estar high. Están en el negocio para generar unas ganancias”, sostuvo el fiscal federal Timothy Henwood durante su turno de refutación al argumento final de la defensa.

Aunque tanto Ayala Vázquez como Cruz Vázquez enfrentaban cargos por conspiración para distribuir drogas, la Fiscalía Federal intentó sellar su caso con los cargos de lavado de dinero que pudieron haber evidenciado las ganancias exorbitantes de la organización.

Angelo Millones enfrenta nueve cargos de narcotráfico y lavado de dinero, pero una de las piezas más incriminatorias pudo haber sido los conciertos de Navidad en el residencial José Celso Barbosa que se detallaba bajo el séptimo cargo del pliego acusatorio federal.

De hecho, la fiscal Hernández inició su presentación con un vídeo de una de las fiestas de Navidad que se realizaron en el residencial de Bayamón, el antiguo bastión de la organización criminal vinculada a Ayala Vázquez.

“Éste era el patio trasero de Ángel Ayala Vázquez y Luis Xavier Cruz Vázquez, donde establecieron un centro de distribución de drogas que operó desde 1995 hasta 2009, vendiendo sustancias controladas los siete días de la semana y las 24 horas del día”, indicó la fiscal al asegurar que el caso se trató de cómo un narcotraficante dominó la importación y exportación de cocaína entre Puerto Rico y varios destinos de Estados Unidos.

“Este caso se trató del control que ejerció Ayala Vázquez mediante drogas, dinero y respeto”, añadió Hernández, quien presentó una exposición detallada sobre los cargos radicados contra Ayala Vázquez y Cruz Vázquez.

Por otra parte, el veterano abogado de Ayala Vázquez, Frank Rubino, argumentó que la fiscalía no pudo presentar evidencia directa contra su cliente, con la excepción de los testimonios que fueron ofrecidos por “convictos”.

“Prueba no es especulación, conjeturas, minuendos o rumores. La prueba surge de hechos concretos y de testigos creíbles. Podría sentar a un deambulante en la silla de testigos para que dijera cualquier cosa, pero esto no sería creíble. Creo que el Gobierno ha presentado una teoría que no se ha podido corroborar con ninguna prueba”, dijo Rubino, durante su argumento final, el cual se basó en gran parte en el término jurídico de duda razonable y la importancia del mismo.

“El Gobierno sí probó, sin duda, que la venta de drogas en el Celso Barbosa era rampante, pero no proveyó ninguna evidencia que vinculara a Ángel Ayala a la venta de las drogas”, agregó.

Antes de la presentación de Rubino, el abogado de Cruz Vázquez, Rubén Cerezo, sostuvo que ninguna evidencia presentada vinculó a su cliente a los hechos imputados.

“Esto ha sido un intento desesperado para tratar de mostrar que mi cliente es culpable. Estos testigos han ofrecido información falsa en su intento por recibir una sentencia reducida”, afirmó.