Héctor Delgado se siente libre de las garras de Satanás

Héctor Delgado lanzará su nuevo disco cristiano, La hora cero, en abril.  (Primera Hora / Pipo Reyes)

Mariela Fullana Acosta / Primera Hora

Era el padrino por excelencia del reguetón. Lo asumió así desde que se lanzó como solista y decidió acompañar su nombre con el apodo de “el Father”. En los vídeos musicales aparecía rodeado de todos los lujos, haciendo alarde de lo que tenía y también de lo que le faltaba por tener. Su nombre artístico se relacionaba con los grandes del género urbano, pero también empezó a asociarse con personas que supuestamente estaban vinculadas al narcotráfico, como Ángel M. Ayala, conocido como “Angelo Millones” o “Buster”.

Hace tres años, sin embargo, el nombre de “el Father” desapareció de la escena, haciendo visible a Héctor Delgado.
Y es que en el 2008 el cantante abandonó los escenarios musicales del reguetón y se convirtió al cristianismo. Desde entonces, ha estado inmerso en su fe, predicando y llevando su “testimonio” a través de toda la Isla.
“El momento en que me convertí fue cuando me di cuenta que el dinero no podía llenarme, que la fama no podía hacerme feliz, que todo lo que tenía en ganancias era una basura porque estaba vacío”, expresó el artista ayer en entrevista telefónica con Primera Hora.
Héctor Delgado sorprendió el pasado viernes cuando participó de una charla sobre la paz en el residencial Luis Lloréns Torres de Santurce, en la que mostró sus dotes como predicador.

“La palabra de Dios es efectiva y yo soy un heraldo y un mensajero de Dios”, dijo el artista, quien asiste a la iglesia Cristo Misionero del sector Delicias en Canóvanas.
¿De qué forma tu conversión al cristianismo te ha cambiado la vida?
Me ha cambiado el nombre. Mi nombre era suicidio, depresión, soledad; mi nombre era funeral, mi nombre era infierno, y todo eso cambió. Ahora soy un hombre lleno de felicidad.
¿Cómo estás ahora?
Me siento libre de un engaño que me tenía Satanás y mi nombre está libre. Antes llevaba un mensaje de muerte y ahora llevo el mensaje de vida de Jesús de Nazaret.
¿Qué piensas de los que opinaban que tu conversión no era real?
Nunca señalé ni culpé a nadie porque cada cual es dueño de su propia opinión, pero sabía que tenía un gran reto en mis manos porque los ojos iban a estar sobre mí. Pero lo que hice y sigo haciendo es demostrar que cuando Cristo llega, cambia a un hombre.
Tu trasformación coincidió con el momento en que se te comenzó a vincular con supuestas personas del bajo mundo. ¿Eso tuvo algo que ver con tu cambio?
La Biblia dice que el hombre que anda en tinieblas no sabe a dónde va y en un momento no sabía a dónde iba, ni me reconocía. Pero Cristo me mostró una verdad y estando en Dios estoy completo. No estoy aquí porque me señalaron ni por lo que la gente pensaba, estoy aquí porque vi en los periódicos y en las noticias que las trompetas estaban a punto de sonar y aseguré mi salvación.
¿Volverás a tu vida pasada como artista?
Nosotros somos de los que no retrocedemos para la perdición. Voltear mi mirada hacia atrás sería un suicidio para mi alma.
¿Qué le dirías a Cosculluela que hace poco fue tildado por el superintendente de la Policía de Puerto Rico de criminal?
El mismo mensaje que le digo a Cosculluela es el que le digo a Puerto Rico entero: que Jesucristo es la verdad y la vida.
¿Tus amigos siguen siendo los mismos que cuando eras “el Father”?
Mis amigos siguen siendo mis amigos y los que eran mis enemigos también son mis amigos.
¿Volverás a los escenarios?
Ahora en abril vamos a sacar una producción discográfica, La hora cero, pero es totalmente cristiana y de alabanza, no de reguetón.
¿Cuál es tu misión, si alguna?
El Señor dijo: “Predica a todas las criaturas” y eso es lo que estamos haciendo para que la gente entienda que Cristo viene ya y que el tiempo se está acabando.
Pero para ti está comenzando, ¿no?
Bueno, sí. Cuando conocí a Cristo, volví a nacer, así que tengo tres añitos (risas).
Héctor Delgado continuará llevando su testimonio a través de diversas comunidades del país. Ayer estuvo en la iglesia Cristo Misionera en Villa Palmeras y en febrero espera visitar los residenciales Torres de Sabana y Monte Park.