Uno de los gemelos asesinados tenía asuntos por saldar no especificados
Por Javier Colón Dávila /jcolon@elnuevodia.com
Con múltiples disparos a quemarropa, desconocidos terminaron ayer en la madrugada con la vida de dos gemelos de 27 años, en hechos ocurridos al lado de un negocio de bebidas y billares en la PR-861, de Toa Alta.
La Policía identificó a las víctimas como Luis Roberto y Roberto Luis Cordero Burgos, ambos hojalateros. El primero era propietario del taller JAR Body Shop en el barrio Minillas, de Bayamón, y su hermano trabajaba con él.
Según la pesquisa, los hermanos acudieron al negocio Willi’s Places, en Toa Alta. Al salir del local, se dirigían hacia su auto estacionado en una marquesina cercana, cuando fueron alcanzados por el fuego asesino.
Luis Roberto fue blanco de 36 balazos en la cara, la espalda y los brazos. Fue encontrado con las llaves del auto en su mano. Roberto Luis fue alcanzado por una bala en la frente, costado izquierdo, brazos y un muslo. Su cuerpo fue encontrado detrás del automóvil.
La Policía no había divulgado ayer un móvil detrás del brutal ataque, pero la capitán Nívea Collazo, jefa de la rama investigativa en la región, indicó que familiares de los gemelos les dijeron que Roberto Luis tenía “deudas en la calle”, pero no precisaron de qué tipo.
En el ataque, una mujer identificada como María Cintrón Torres, de 28 años, sufrió abrasiones al caer al suelo en medio de la lluvia de balas. La cantidad de víctimas pudo haber sido mayor, ya que en el negocio habían entre 25 y 30 personas.
En la escena, se ocuparon casquillos calibre .40 y .45, y según testigos el sonido de la ráfaga de disparos da a entender a la Policía que las armas estaban alteradas para que funcionaran como automáticas.
Los gemelos, que no tenían récord criminal, residían en el barrio Cerro Gordo, de Bayamón. La esposa de Luis Roberto está embarazada.
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