Fue tildada de asesina por gente que presuntamente vandalizó su residencia
Por Ricardo Cortés Chico / rcortes@elnuevodia.com
Cuando Ana Cacho, la madre del niño asesinado Lorenzo González Cacho, regresó en la mañana de ayer a su apartamento en Guaynabo, encontró que la puerta del inmueble había sido vandalizada con un mensaje que leía “asesina, mataste a Lorenzo”.
Esto fue suficiente para que la mujer decidiera ayer mismo mudarse de la residencia en el condominio Villa Caparra en Guaynabo, según informó su abogada Sharon González.
Según la togada, el incidente se reportó en horas de la mañana. Cacho, quien la noche anterior había pernoctado fuera de su apartamento tras reunirse con varios de sus familiares, recibió una llamada de un vecino alertándole del mensaje escrito con un marcador en la puerta.
“Asecina (sic) matas (sic) a Lorenzo”, lee el mensaje escrito sobre la puerta del apartamento.
Según la oficina de prensa de la Policía en Bayamón, el caso ayer fue investigado por los agentes como una querella de daños a la propiedad.
El sargento Félix Hernández, quien tomó junto a otro agente la querella, no quiso precisar los detalles de la intervención policial. Sólo se limitó a señalar que no estaban autorizados para hablar del caso.
Personal de la unidad de Servicios Técnicos de la Policía acudió a la residencia en la tarde de ayer para levantar cualquier evidencia relacionada al suceso.
González indicó que al momento se desconocía si había alguna cámara de seguridad que hubiese captado el momento del vandalismo. No obstante, el edificio de 16 pisos donde ocurrieron los hechos tiene control de acceso en el portón que da a la calle y en el vestíbulo que da hacia los ascensores que llevan a los apartamentos.
González atribuyó el vandalismo a “las expresiones inflamatorias que ha hecho el Estado” sobre el caso del asesinato de Lorenzo.
Las autoridades dicen que Cacho es sospechosa del crimen y dos decisiones judiciales le atribuyen haber presionado a sus otras dos hijas para que no digan lo que saben de los hechos. Pero no ha sido acusada.
“Todos los días el Estado dice que es sospechosa... El Estado tiene que empezar a asumir su responsabilidad. Lo que le pase a Ana Cacho, lo que ha vivido hoy, lo que vive ella en la calle, que la gente le grita cosas, sucede por la información irresponsable que la gente vierte en los medios, que de una forma y otra inflaman la opinión pública contra Cacho”, dijo la abogada.
González, entretanto, aseguró que ésta no es la primera vez que ocurre un acto de este tipo. La abogada indicó que el 27 de mayo de 2010 fue vandalizada la residencia de Cacho en la urbanización Dorado del Mar, donde Lorenzo recibió las heridas que terminaron con su vida hace poco más de un año.
Las heridas de Lorenzo fueron en la parte posterior de la cabeza con un objeto contundente y en la cara con un objeto cortante.
Según las versiones iniciales de la Policía sobre el caso, Cacho dijo que el menor se había caído de su cama. No obstante, esto fue descartado por el Instituto de Ciencias Forenses tras la autopsia. Cacho ha reiterado que no mató a su hijo.
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