Tribunal determina que no podrá relacionarse con las niñas
Por Ricardo Cortés Chico / rcortes@elnuevodia.com
La jueza Sonia del Toro determinó hoy que ningún miembro de la familia materna del niño asesinado Lorenzo González Cacho podrá relacionarse con las hermanas del menor y que el Departamento de la Familia no tendrá que ofrecer ningún servicio conducente a que se reanuden las relaciones materno filiales entre Ana Cacho y las niñas de 6 y 14 años.
Para todos los efectos, esta determinación supone que Cacho, la madre de Lorenzo y sospechosa del crimen, no podrá relacionarse con sus otras hijas por tiempo indefinido, supo El Nuevo Día.
“Se declara ha lugar la petición del Departamento de Familia y se decreta el cese de esfuerzos razonables del Departamento de Familia en cuanto a Ana Cacho González”, sostiene la sentencia de Del Toro.
“En su consecuencia, se priva a la parte promovida, Ana Cacho González de la custodia legal y permanente de las menores, además se mantiene la prohibición de las relaciones maternofiliales con otros miembros de la familia”, añade la determinación de la jueza.
En una parte de la sentencia, según se informó a El Nuevo Día, se establece que nadie puede obligar a Cacho a hablar ante las autoridades sobre lo que le ocurrió a Lorenzo en la madrugada del 9 de marzo, día en que fue asesinado.
No obstante, la jueza presuntamente establece que esa decisión libre y voluntaria de callar tiene consecuencias en el caso de maltrato por negligencia contra Cacho.
La consecuencia mayor, aparentemente, es que las autoridades no pueden devolverle a sus hijas. Se justifica, sin embargo, que Cacho no demostró que tiene la capacidad necesaria para garantizar la seguridad y el bienestar físico o emocional de las menores aún cuando haya completado los servicios ofrecidos por el DF.
Lorenzo murió a consecuencia del golpe que recibió en la parte posterior de la cabeza y las heridas cortantes en su cara.
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